El caso del Testigo de Jehová llega antes a la Corte Suprema
Su mujer tiene un plazo de 24 horas para responder al recurso presentado por el padre de Pablo Albarracini, para que le realicen la transfusión que necesita. Luego, el caso pasaría al máximo tribunal.
Está en coma, pero un documento que firmó impide que le salven la vida
La Cámara Civil le exigió a la mujer del Testigo de Jehová Pablo Albarracini --quien hace 27 días que se encuentra en coma tras haber sido baleado en un asalto-- que responda en un plazo de 24 horas el recurso extraordinario presentado por el padre del joven para que le puedan realizar la transfusión que necesita. De esta manera, el caso podría llegar mañana a la Corte Suprema de Justicia.
La abogada de Jorge Albarracini, Mariana Gallego, informó que "en forma excepcional la Sala A de la Cámara Civil exigió a la mujer del joven que responda en 24 horas en lugar de los días que establece el procedimiento ordinario".
Antes de expedirse, la Cámara deberá escuchar los argumentos de la esposa de Pablo. La mujer pide que se respete la voluntad del joven (quien como Testigo de Jehová había firmado un documento, legalizado ante escribano, en el que manifestaba su decisión de no ser transfundido).
La batalla legal entre el padre de Pablo y su mujer comenzó casi en el mismo momento en que el joven llegó a la clínica Bazterrica, luego de haber sido baleado por delincuentes que quisieron robarle su auto, en San Justo.
El 4 de mayo, joven llegó a la clínica con pérdida de masa encefálica y un balazo en su ojo izquierdo. Los médicos lo operaron y, en seguida, indicaron que necesitaba una transfusión urgente de glóbulos rojos. Fue entonces cuando comenzó el enfrentamiento entre el padre de Pablo y su mujer.
Es que el joven es Testigo de Jehová (una religión que prohíbe las transfusiones de sangre) y su esposa, de la misma fe, se opuso a que sea transfundido y fue a la Justicia para evitarlo. Ayer, su padre presentó un recurso extraordinario para que intervenga la Corte Suprema.
Mientras tanto, la salud de Pablo --quien no recuperó la conciencia desde el ataque-- empeora. El viernes debió ser operado en el Hospital Bazterrica, donde está internado desde el 4 de mayo.
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