El periodismo deportivo, género en el que Gay Talese (Ocean City, Nueva Jersey, 1932) brilla a la altura de los más grandes, no es más que una de sus facetas, pero la verdad es que en él se encierra el ADN de su escritura: “En el Estado de Nueva York, a unos noventa kilómetros de Manhattan en dirección norte, al pie de una montaña, hay un antiguo club social abandonado. La pista de baile está cubierta de polvo; los taburetes del bar, patas arriba, y nadie recuerda cuándo fue la última vez que se afinó el piano…”. Así comienza El perdedor, uno de los 37 artículos que escribió Gay Talese sobre Floyd Patterson y recoge El silencio del héroe, la antología de crónicas deportivas de este autor que ahora publica en español Alfaguara. Al escritor no le interesan los momentos de gloria que aureolan el pasado del campeón mundial de los pesos pesados más joven de la historia, sino las heridas que dejó en su alma el sabor de la derrota. “El deporte”, dejó escrito Talese, “trata
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Mostrando entradas de mayo 13, 2013
En busca de la identidad perdida
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Margate es una ciudad costera de casi 50.000 habitantes. Los cafés, pubs a la vieja usanza, galerías de arte y tiendas de objetos de época todavía recuerdan el viejo esplendor de lo que hace años era una boyante población veraniega a la que la globalización, mucho más que la pérfida Europa, parece haber condenado al declive. “Aquí antes venían dos millones de visitantes al año. Ahora, con los vuelos baratos, se van a otros sitios”, explica Maggie Vandamme, de 58 años. Maggie ha vivido varios años en Francia, hasta que la repentina muerte del marido francés del que aún conserva el apellido le hizo volver a Margate, donde hace unos meses abrió junto a su hermano, Keith A. Grossmith, una galería de arte, The Grossmith Gallery. “No estaba registrada para votar. Pero si hubiera podido, habría votado por el UKIP”, asegura. “Comprendo por qué les han votado. La gente está preocupada con la inmigración. Y lo de aquí es más que una recesión”, dice. El hermano tercia enseguida: “No ha