El piloto del Air France siniestrado en el Atlántico, minutos antes de caer al océano: "¡Las indicaciones ya no valen!"

La Oficina de Investigación y Análisis publica el primer informe sobre las grabaciones en las cajas negras del vuelo Río-París en el que murieron sus 228 ocupantes.- Una maniobra del copiloto de ascender la aeronave hasta los 10.000 metros resultó decisiva


ANTONIO JIMÉNEZ BARCA | París 27/05/2011

Uno de los pilotos del vuelo de Air France 447 (Río-París) que se cayó al Atlántico dijo, cuando el avión ya cabeceaba irremediablemente hacia abajo, dos minutos y medio antes de que se estampara contra el océano, refiriéndose a los datos que le ofrecía el panel de mandos: "Ninguna de las indicaciones vale ya". La Oficina de Investigación y Análisis (BEA, en sus siglas en francés) ha publicado hoy, basándose en las grabaciones de las cajas negras, recuperadas del fondo del mar, un informe que permite saber qué ocurrió en este misterioso vuelo de Air France del 1 de junio de 2009 en el que murieron sus 228 ocupantes.

Los primeros resultados de las cajas negras de Air France apuntan a un error de los pilotos

Todo pasó en menos de cinco minutos. A las 2.06 de la madrugada, el copiloto a los mandos del avión informó a las azafatas de que se adentraban en un terreno de turbulencias. "Esto se va a mover (...) Os aviso cuando termine". A las 02.10, el piloto automático se desactivó debido a que las medidas de velocidad que le llegaban resultaban incoherentes. Una de las ondas, probablemente, se heló debido al granizo. El copiloto tomó los mandos.

Según expertos consultados ayer por Le Monde y Le Figaro, el momento decisivo llegó entonces, cuando el copiloto ordenó al avión ascender. Paralelamente, llamó al comandante del avión, que en ese momento descansaba.

La maniobra de forzar al avión hacia arriba, hasta alcanzar los 38.000 pies (10.000 metros de altitud) desestabilizó, según estos expertos, el avión, que comenzó a cabecear hacia abajo. Tardó 3 minutos y 30 segundos en estamparse contra el océano. Antes, el comandante había entrado en la cabina obedeciendo a la llamada de su subordinado. De hecho, menos de un minuto antes de que el avión golpeara contra el agua, le indicó al copiloto: "Venga, tú tienes los mandos".

Las cajas negras dejaron de grabar a las dos horas, 14 minutos y 28 segundos. La BEA insiste en que lo que han publicado hoy es, ante todo, un relato de los hechos; esto es, "una constatación y no una explicación", y que deberá estudiarse aún por qué pasó lo que pasó. Promete remitir un informe más elaborado a finales de julio.